Un equipo de investigadores chinos ha creado un apósito «inteligente» que cambia de color en las tres horas siguientes a su colocación cuando detecta bacterias infecciosas en una herida, incluidas las peligrosas «superbacterias» resistentes a los antibióticos.
Los científicos, que pertenecen a la Universidad del Noreste de China, publicaron este mes su investigación en la revista especializada ACS Nano, donde explicaron que el apósito se basa en varias capas de hidrogel que funcionan mediante un código de colores para advertir de la presencia de agentes infecciosos, recoge hoy el diario South China Morning Post.