Luego de que sus familiares se oponían a enterrarlo, alegando que su pariente respiraba y tomaba agua, finalmente fue sepultado este sábado el cadáver de un hombre que había sido declaro muerto el pasado miércoles por los médicos.

Se trata de Julio Vinicio Pierret, de 27 años, que de acuerdo al diagnostico médico falleció a causa de problemas pulmonares, pero sus familiares no aceptaban su muerte.